Ingredientes: patatas / Cebolla / harina de garbanzo / agua / Leche vegetal / Vinagre de vino blanco / Bicarbonato / Nuez moscada, sal y pimienta.
Parece complicado y fuera de este mundo, pero no! La tortilla de patatas vegana es posible, fácil y lo mejor de todo, bonísima! Yo, no es por defenderla delante de la original, pero he de decir, que me gusta más esta tortilla que la hecha con huevo... Ahí lo dejo. Para comprobarlo, probadla!
Se hace como una tortilla de patatas convencional, así que hacedla como de costumbre. Yo, pico la cebolla y la voy pochando. Corto las patatas en rodajas finas y tapo la sartén para que se vaya pochando. Ya sabéis, que la patata no se tiene que freír, se debe pochar y eso se hace a fuego medio-bajo, tapado y un ratito.
Conforme la patata se va reblandeciendo, la voy cortando con la misma pala, para que se vaya haciendo puré en la misma sartén. Cuando está hecho, la saco con la espumadera y lo dejo sobre papel absorvente para que pierda todo el aceite excesivo que sea posible. En este punto, añado la sal, pimienta y nuez moscada.
Ahora viene lo bueno! El huevo vegano por excelencia!! Mezclamos en un bol a parte, 4 cucharadas de harina de garbanzo, con un vaso de agua, un chorrito de leche de avena y otro de vinagre para matar el posible sabor a harina. Cucharadita pequeña de bicarbonato que no tengo ni pajolera idea de para qué sirve, pero compré un bote y tengo que gastarlo y bueno, como la tortilla quedó muy buena, repetiré con él.
Mezclamos todo esto bien, tiene que quedar una textura similar a la del huevo, pero algo más líquida.
Le añadimos la mezcla a la patata y lo ponemos en la sartén con una cucharada de aceite y lo otro diferente, es el tiempo de espera. Con esta tortilla nos tendremos que esperar más a que la harina cuaje, aproximadamente 8-10minutos por banda. Veremos que se hace cuando los bordes adquieren consistencia y, al mover la sartén, la tortilla también se mueve entera.
Bon profit!
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